Sedación consciente en tratamientos dentales

La mayoría de los pacientes que acuden al dentista presentan la llamada “odontofobia”, es decir, miedo a sentarse en el sillón del dentista. Causada a menudo por experiencias o traumas infantiles, temor al dolor, o experiencias de personas ajenas, es una de las principales causas del descuido bucodental. El paciente deja de acudir a sus revisiones, deja de realizarse los tratamientos necesarios para mantener la boca sana y por ello su boca empeora y comienza un círculo vicioso.  Sin embargo, existe una técnica que permite dejar atrás la angustia y el temor de acudir al dentista: se trata de la SEDACIÓN CONSCIENTE, un procedimiento seguro e innovador, muy extendido en las clínicas dentales de Estados Unidos y el Reino Unido desde hace mucho tiempo, y que elimina toda sensación negativa a la hora de someterse a un tratamiento dental.

La principal clave de esta técnica es que la persona está plenamente consciente y con todas sus funciones vitales inalteradas, por lo que puede seguir las indicaciones del dentista mientras le realiza el tratamiento, pero sin sentir miedo o ansiedad. Además, dada la sensación de relajación que experimenta, existe la percepción que la duración del procedimiento es mucho menor a la real, algo que facilita mucho el trabajo al profesional. En este procedimiento se combina el control del dolor a través de la anestesia local en la zona a tratar y el control de la ansiedad con la sedación.

¿Qué es?

La sedación consciente es una técnica con aplicación intravenosa que tiene como objetivo obtener un estado de relajación y tranquilidad por parte del paciente, lo que contribuye a que se realice el tratamiento sin molestias y dolor.

¿Ventajas?

  • Eliminación del temor al dentista y de la ansiedad.
  • Mayor seguridad y estabilidad del paciente.
  • Posibilidad de realizar todos los tratamientos en una sola sesión: implantes, tallados, endodoncias, extracciones…
  • Completa colaboración del paciente y facilitación de la labor del odontólogo.

¿Para quién está indicado?

  1. Pacientes con estrés, miedo y ansiedad cuando tienen que acudir al dentista y someterse a un tratamiento.
  2. Niños: Las principales ventajas de emplear esta técnica en niños son la eliminación del miedo y la ansiedad y la percepción de dolor durante el tratamiento. Además, al no vivir su paso por la clínica dental como una experiencia negativa, previene el desarrollo de la fobia dental.
  3. Personas con discapacidad:  La mayoría de las personas discapacitadas tienen dificultad para cooperar durante una consulta dental. Muchos pacientes con autismo, síndrome de Down o parálisis cerebral pueden ser tratados sin pasar por el quirófano. Con esta técnica disminuye el estrés, la ansiedad, el riesgo de aparición de crisis epilépticas y se atenúan movimientos involuntarios, haciendo posible realizar el tratamiento dental.
1 comentario
  1. sandra
    sandra Dice:

    Thank you so much for your comment! Our aim is to provide the maximum information for our patients. We are glad you liked it!

    Responder

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *